Cataluña, País Vasco y Extremadura sufren una caída del comercio en 2017 VENTAS MINORISTAS/ El consumo se frena desde el 3,5% en 2016 al 1,4% en 2017, lastrado por la crisis secesionista catalana, el buen tiempo en otoño o la subida de los precios de los carburantes. Pablo Cerezal. Madrid El consumo mantuvo una tó- nica positiva en España a lo largo de 2017, con un crecimiento del 1,4% en el conjunto del año, con respecto al mismo periodo del año anterior. Con ello, las ventas registran su cuarto año consecutivo en terreno positivo, aunque con una notable tendencia a la baja con respecto a los dos años anteriores. Además, y contrariamente a lo que sucedió en los ejercicios previos, hay tres comunidades en negativo: Cataluña, País Vasco y Extremadura, En concreto, el Índice de Comercio Minorista sufrió una ralentización de más de dos puntos respecto al pasado ejercicio, cuando las rentas crecieron un 3,5%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Y un deterioro similar también respecto a 2015, cuando las ventas al por menor avanzaron un 3,6%. Este frenazo tuvo su origen en varios factores, que van desde la crisis política en Cataluña hasta el buen tiempo en la recta final del año, pasando por el agotamiento de la demanda embalsada de bienes de equipo o la subida de los precios de la gasolina, que restó poder adquisitivo a los consumidores. Una de las señales que evidencian el impacto del conflicto soberanista catalán en el dato general es que esta región es una de las tres únicas donde cae el consumo, con un descenso del 0,2%. Si bien esta cifra es la misma que Extremadura y muy similar a la del País Vasco (-0,1%), hay que tener en cuenta que la cifra catalana se resiente notablemente a partir de la convocatoria del referéndum. En octubre, las ventas se hundieron un 4,1% y la ralentización se ha prolongado, de momento, hasta diciembre, cuando las ventas sólo subieron un 0,2% (frente al 1,5% en el conjunto del país). Este efecto no sólo se debió a que la mayor incertidumbre lastró la compra de los bienes más duraderos (los concesionarios acusaron un descenso de ventas del 30% en octubre), sino también a que el desplome de la llegada de turistas en los meses finales del año habría golpeado las ventas en las grandes superficies, Más de 13.000 pequeñas tiendas cerraron el año pasado Expansión. Madrid Los autónomos del comercio minorista descendieron en 13.315 en 2017, lo que supone una pérdida diaria de 36 autó- nomos al día. Cataluña encabezó el cierre de comercios, con una pérdida de 3.127, según informó ayer la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). Todas las comunidades autónomas perdieron comercio minorista. En esta preocupante clasificación, a Cataluña le siguieron Andalucía, con 1.960 autónomos menos; la Comunidad Valenciana, con un cierre de 1.449 pequeños comercios, y Galicia, que perdió 1.101 autónomos. La Rioja es la que menos tiendas perdió, con un descenso de 146 autónomos. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, pidió al Gobierno medidas para ayudar al sector del comercio minorista. “El comercio, que vertebra muchos pueblos y ciudades de nuestro país, es uno de los sectores a los que más ha afectado la crisis y que aún está pasando por un momento complicado”. Por estas razones, Amor dijo que “es necesario tomar medidas concretas que ayuden a acabar con la sangría que estamos padeciendo”, apuntó. El dirigente de los autónomos también mostró su preocupación por la repercusión de la crisis política en el pequeño comercio de Cataluña. Amor subrayó que “los vaivenes políticos pasan factura, tanto a las ventas del comercio como al colectivo de autó- nomos y su facturación”. “Por ello, esperamos que cuanto antes se normalice la situación y [Cataluña] vuelva a ser locomotora en la creación de empleo en nuestro país, como fue en los últimos años”, señaló. Bases mínimas La base mínima de cotización de los autónomos ha aumentado un 3% este año, hasta los 919,8 euros mensuales. En el Régimen General ha subido un 4%. Las bases máximas se mantienen en ambos regímenes en 3.751,2 euros, según la orden de cotización a la Seguridad Social que publicó ayer el Boletín Oficial del Estado. Por contingencia comunes, los autónomos que tengan paro –por cese de actividad– deben cotizar el 29,3 %. EL CONSUMO SE DESACELERA Fuente: INE Expansión ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV DIC ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV DIC Variación interanual, en %. Índice de Comercio Minorista Variación interanual en elconjunto de 2017. Cifra de negocios del comercio minorista 3,6 4,3 4,2 3,8 3,1 4,8 4,7 3,6 2,8 2,7 2,7 2,3 0,2 2016 2017 0,6 1,4 2,1 2,7 2,2 1,3 1,4 1,7 0,2 1,9 1,2 La Rioja País Vasco Navarra Murcia Madrid Galicia Extremadura Com.Valenciana Cataluña Castilla - La Mancha Castilla yLeón Cantabria Canarias Islas Baleares Asturias Aragón Andalucía TOTAL 1,2 1,3 1,6 1,0 2,8 3,2 0,4 0,8 1,3 -0,2 1,1 -0,2 1,7 1,9 1,5 2,6 -0,1 2,5 La desaceleración del consumo se ha notado particularmente en la ocupación, en la recta final del año. El sector del comercio minorista, que incrementaba su plantilla a un ritmo en torno al 2% durante los primeros trimestres del ejercicio, se frenó hasta el 1,2% en diciembre, en tasa interanual. Con ello, rubricó el peor mes desde agosto de 2015. Por comunidades autónomas, las zonas más turísticas han liderado la creación de empleo en el conjunto del año. En Canarias, por ejemplo, la ocupación crece un 4,8% en 2017, seguida de Baleares (4,2%) y Murcia (2,6%). Sin embargo, Andalucía y Cataluña desaprovechan el tirón de los visitantes extranjeros y avanzan un 0,9% y un 1,2%, respectivamente, quedando por debajo de la media nacional (1,7%). El último mes del año, además, hay tres regiones que presentan un ligero deterioro: el País Vasco (donde el empleo cae un 0,3%), Castilla y León y Castilla-La Mancha (con descensos del 0,1%). La contratación frena en la recta final del año según los empresarios. Por el contrario, otras comunidades muy turísticas, como Canarias (con una subida del 3,2% en el conjunto del año) o Baleares (2,8%) lideraron el mapa, aprovechando el boom de visitantes extranjeros. Un otoño suave El segundo gran problema ha sido la suavidad del otoño, que ha desincentivado la venta de ropa de temporada y ha animado a muchas personas a esperar unos meses hasta el periodo de descuentos. Con ello, el dato de diciembre (1,5%) “deja cortas las previsiones del sector, que contaban con un 3% de crecimiento”, señala la Confederación Española de Comercio (CEC). Además, esta patronal critica que “el gran perjudicado es el comercio de proximidad, que cerró diciembre con pérdidas”. En concreto, las tiendas unilocalizadas sufren un descenso de ventas del 2,4% en diciembre, mientras que las grandes cadenas ganan un 4,2%, algo que la CEC achaca a que las pymes no “pueden entrar en la guerra de márgenes para reducir precios a lo largo de todo el año” con la liberalización de las rebajas. En tercer lugar, se ha notado el efecto del agotamiento de la demanda embalsada de bienes de consumo duradero del que advirtió el Banco de España en uno de sus últimos boletines. Aunque el Índice de Comercio Minorista no realiza este desglose exactamente, sí se puede advertir un cambio en los ritmos tanto de la alimentación (cuyas ventas pasan de crecer un 1,1% en 2016 a un 2,2% en 2017) como del resto de bienes de consumo (que se frenan del 5,2% al 1,3%). Esto se debe a que durante la crisis, los ciudadanos optaron por ahorrar en aquellos productos que suponían un mayor desembolso y cuya compra podían aplazar, y empezaron a dar salida a esta demanda embalsada tan pronto como recuperaron su confianza en la economía. Ahora, en cambio, esta demanda retenida está ya agotada, por lo que se empieza a normalizar. Finalmente, la subida de los precios de los carburantes también puede haber hecho mella en el consumo del resto de los bienes. Un litro de gasolina, que costaba 1,15 euros en 2016, subió a 1,22 euros el año pasado, mientras que el gasó- leo se encareció de 1,01 euros a 1,1 euros en el conjunto del año pasado. Paradójicamente, las ventas en las estaciones de servicio prácticamente no se han visto afectadas (pasan de crecer un 0,6% en 2016 a un 0,4% en 2017), debido a que su demanda es muy inflexible, pero el consumo en el resto de los establecimientos se ha frenado del 3,6% hace dos años al 1,4% en 2017.